Sé que no es un ejercicio muy agradable que hacer, pensamos que es innecesario, pero a partir de conocer al cliente, desarrollaremos toda nuestra presencia digital.
Sin saber quién es nuestro cliente, no podremos comunicarnos de manera correcta. De definir al cliente depende el contenido, la publicidad, el producto o servicio y las ventas. Todo gira en torno al cliente.
Este ejercicio debe ser por escrito, aterrizado en un documento, no solo en tu cabeza. Cuando escribimos, solemos aclarar y tener mejores ideas.
¿Cómo empezar a definir al cliente?
Primero vamos a imaginar quién es esa persona perfecta para comprarnos. Pongámosle un nombre, sexo, edad (definida, no vale decir entre 30 y 45 años) y busca una foto.
Luego comienza a describir a esa persona, qué hace, qué le gusta, qué les disgusta, cómo se comunica (aquí piensa cómo usa las redes).
Puedes describir a más de un cliente ideal, si te sientes muy perdido puedes pensar en tus clientes actuales con cuál de todos ellos te quedarías, cuál de esos clientes querrías que se multiplicara por mil porque quieres que sea el único tipo de cliente que tengas.
Definir el cliente optimiza tu publicación, intentar hablarle a todo el mundo es hablarle a nadie.
